La verdadera historia de la bruja de Blair

Muchos fanáticos del terror conocemos la película The Blair Witch Project pero lo que todavía se sigue sin conocerse del todo es la verdadera historia de esta, ya que existe una leyenda que relata una macabra historia que empezó a escribirse en febrero de 1785.

Elly Kedward había llegado al estado de Baltimore por medio de un barco en 1723, era una anciana bastante misteriosa que aterraba a cualquiera que se le topara en su camino, pasaron los años y en 1785 en el pueblo de Blair, la mujer había engañado a varios niños dándoles caramelos para que fueran a su casa y después pudiera sacarles sangre de las piernas y los brazos.

Una de las noches de ese mismo mes, los niños habían decidido contarle a sus padres lo que estaba pasando diciéndoles lo que les había hecho Elly mostrándoles la heridas para que fueran a buscar a la mujer y la acusaran de brujería.

Al final el veredicto resulto culpable de brujería, catolicismo y prostitución. Después de esto decidieron que lo mejor era expulsarla del pueblo en pleno invierno, pero los habitantes esperaban llegar aún más lejos, mandándola en una vieja carretilla a lo más profundo del bosque.

Otras versiones cuentan que la amarraron de un tronco para después abusar de ella, haciéndole varios cortes, obligándola a tirar su sangre a los árboles y soltando perros para que acabaran con su vida sin tener en cuenta que Elly saldría viva.

Como sea que hayan ocurrido las cosas, los ciudadanos ya habían dado por muerta a la mujer pudiendo sentir de nuevo la paz en el pueblo, solo que ellos no sabían que apenas era el principio de sucesos escalofriantes.

Durante el invierno de 1786, había desaparecido la hija del magistrado y después de unos días el padre también estaría desaparecido, luego de que pasara una semana uno de los primeros niños que acuso a Elly salió a jugar y nunca más regreso. Cuando termino el invierno la mitad de los que habían acusado a la anciana ya habían desaparecido.

Todos empezaron a culpar a Elly diciendo que se trataba de una maldición, abandonando el lugar y condenando a Blair como pueblo maldito.

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