10 años el mismo sueño
Siempre he teniendo el mismo sueño desde que tengo ocho años, en mi sueño suelen estar mis amigos en el sofá de mi casa comiendo pizza y jugando videojuegos, mientras una chica de apariencia terrorífica nos observa todo el tempo.
Sus ojos te hipnotizan y su
sonrisa te provoca una sensación rara en el estómago. Cada vez que alguien le
intenta hablar en mi sueño ella no hace nada más que devolver una expresión de
enojo en su rostro acompañado con gritos que es ahí cuando mi sueño termina.
Cada vez que lo tengo, me sigo preguntando por que lo he tenido durante mucho
tiempo, hasta le he contado a mis padres, pero ellos solo dijeron que era algo
extraño que no debía preocuparme. Desde que me dijeron eso decidí confiar en
ellos y jamás contarle a alguien.
Un día en la escuela estaba con
mis amigos y quise compartirles mi sueño, yo ya había hecho un pacto con ellos
de que nuestros secretos nunca serian revelados, les empecé a contar y después ellos
sorprendidos me dijeron que también han tenido el mismo sueño durante mucho
tiempo.
Volví a tener el sueño en la
noche, mire a mis amigos y les pregunte si era mi sueño o el de ellos, ellos
solo se empezaron a reír y dijeron que todos estábamos compartiendo el mismo
sueño, les pregunte por la chica tenebrosa y que era lo que escondida al lado
de ella, ellos no me supieron contestar pero de repente escuchamos un grito,
vimos su mirada llena de enojo, me llene de valentía y le dije que estábamos hartos
de estar en el mismo nivel en el sueño siempre, que ya lo queríamos superar.
Despertamos y volvimos al mundo real para discutir lo que estaba pasando, se nos ocurrió un enfrentamiento con la chica para atarla y exigirle las respuestas que queríamos. En lo que estamos discutiendo un chico solitario de nuestra clase se acercó diciéndonos que teníamos que leer una nota antes de hacer cualquier cosa, todos estábamos confundidos y cuando vimos la nota éramos nosotros con la chica del sueño. Era un dibujo de ella atada con palabras escritas encima de su cuerpo diciendo “no hablar”. El dibujo nos situaba en una puerta que decía que si se abría quedaríamos libres de ese sueño.
Esa noche el sueño comenzó con lo
mismo de siempre, para no vernos tan sospechosos y agarrar el momento perfecto
para atacar, caminamos hacia a la puerta y cuando estábamos a punto de abrirla
ella estaba gritando que iba a matar a todos si nos íbamos, a nadie le importo
y terminamos abriendo la puerta.
Me despertó el sonido de mi alarma, abrí los ojos y me di cuenta que me encontraba en un hospital, a mi lado estaban las camas de tres de mis amigos, pero ellos tampoco sabían lo que estaba pasando. El doctor entro y nos dijo “Un milagro, se han despertado a la par”. Todos le estábamos preguntando qué era lo que estaba pasando a lo cual nos contestó que todos nosotros habíamos estado en coma desde hace diez años.
Nos preguntó que por qué nos llamábamos
por nombres distintos si nunca nos habíamos conocido, ni siquiera estudiado en
la misma escuela. De alguna forma los sueños se vincularon y se creó nuestra
propia realidad. Ya han pasado cinco años de esto, mis amigos y yo nos seguimos
llevando a pesar de ya estar en la universidad, esto lo cuento porque hace poco
recibí una correspondencia con una carta que decía “Solo porque han pasado
cinco años no significa que se terminó. Hasta pronto”.
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